MI PARAÍSO...

MI PARAÍSO...
Es ese lugar para soñar...al atardecer, viendo las puesta de sol en las largas y cálidas tardes de verano, a la sombra de la parra, degustando lo que cada uno quiera. Relajados sobre una mullida manta extendida sobre la yerba. En las cómodas tumbonas y hamaca, a la luz de las velas, con buena música, o escuchando el silencio, o los sonidos de la naturaleza. DISFRUTANDO.

lunes, 11 de noviembre de 2019

ALIMENTOS DEPRECIADOS II

     Pocos alimentos habrán saciado tantas bocas y durante tantos años, como los tres de la foto siguiente. A pesar de ello, y del gran valor nutricional de los mismos, hoy, dos de los tres: maíz y castañas, no merecen casi ni la consideración de alimento sano, cuando son además alimentos libres de glúten y por lo tanto, óptimos para quienes sufren Celiaquía.




     Por el contrario, las patatas, en algunos lugares como Cuba, son el alimento básico. Tal vez gracias a su consumo, o al no consumo de proteínas, grasas, etc.. los ciudadanos de ese país envejezcan libres de colesterol y triglicéridos. Con hambre y/o carencia de alimentos, pero sanos. 



    Apena ver tantos centenarios castaños y con semejante porte, que a pesar del abandono y las mutilaciones siguen en plena producción.., y cuyos frutos nadie recoge del suelo, cuando en otros lugares, como Suiza, Italia, Portugal, Galicia o León, o la cercana Tuña, son aprovechados para su venta, generando cientos de euros cada semana a quienes no dudan en agacharse a recoger las castañas. Hay cadenas alimentarias que compran  todas las castañas, para su posterior comercialización. A 4 euros escasos se venden en algunos sitios.
   De las 66 variedades que se recogían en Asturias, hoy no se comercializa ni una decena: Valduna, Chamberga, Bacoa, Vaquera, Miguelina, Parede o Paré, Padana, Verdina, Vendimiega.
   Cuando este producto podría ser un gran recurso agrícola y forestal. Si se recogen las castañas del suelo, este se mantiene limpio.., al estar limpio y cuidado, no hay fuegos, y además, salen muchas setas (los Boletus edulis se pagan a casi 20 € el kilo). Hay que añadir el valor de la madera, y, el alto valor del fruto transformado, los marróns glacés se cotizan caros en otros países.
   Realmente son varios y amplios los valores añadidos de los montes si se cuidan los castaños.
   Además del valor etnográfico (amagüestos, sotos, xoxas, cestos y maniegos, pinzas o bornazas, fardelas, llar, caínzo..)  



    Esas pequeñas manos de la foto superior, pertenecen a un hombre de 96 años que cada día se entretiene clasificando muchos kilos de castañas: las Valdunas para vender, y las pequeñas o malas, para alimentar a los cerdos (lo rico que sabe el jamón de los cerdos engordados con castañas).
     Hay que tener ganas de trabajar, y de alimentarse de forma sana.


   Los clientes celíacos que desayunan en mi casa, saben que cuentan cada día con  panes y dulces hechos con maíz de aquí. Vida y alimentación SLOW.



   En la siguiente foto, buñuelos de castañas y mermelada de castañas al ron, del  rico desayuno de hoy.