MI PARAÍSO...

MI PARAÍSO...
Es ese lugar para soñar...al atardecer, viendo las puesta de sol en las largas y cálidas tardes de verano, a la sombra de la parra, degustando lo que cada uno quiera. Relajados sobre una mullida manta extendida sobre la yerba. En las cómodas tumbonas y hamaca, a la luz de las velas, con buena música, o escuchando el silencio, o los sonidos de la naturaleza. DISFRUTANDO.

jueves, 15 de septiembre de 2011

ARQUITECTURA RURAL

            Si el fin de semana fué deportivamente hermoso, la semana comenzó con un tinte, doblemente cultural: Arquitectura y Rural.  Es decir, la adecuada conservación y restauración de : fuentes, puentes y molinos, en Huesca. Familia que aquí podría aumentar con brañas, teitos y chozos, hórreos, paneras. fraguas, pisones, ocheras, caleiros...y...

          

   Al transformador de la luz de la foto, ya no le tocará nada. Símbolo de una época..., se murió hace dos años cuando una pala lo tiró para ensanchar ligeramente la carretera.

    Escuchando la última conferencia del lunes, me di cuenta de algo importante. Quiero ser Paisajista. Diseño paisajes ajardinados y rurales, describo paisajes, interpreto paisaje, pinto paisajes, llevo el paisaje al plato..., traslado el color del paisaje a mi mundo, sueño con el paisaje, con MI PAISAJE RURAL y con su color. 
   Aquí discrepo del nuevo Director General de Patrimonio Cultural, Juaco López, el cual , al igual que otros ponentes del Congreso de Arquitectura Rural, opinan que debe haber hegemonía en el color de las edificaciones, para evitar protagonismos. Menos es más, decían. Que nada sea llamativo..., que no se note el color. "Si el color está en la naturaleza y en el paisaje, en la vida, en los ojos del que mira...,y del que quiere ver. Siempre". 
Para mi, el color es VIDA.

Este Congreso traerá cola, decían en su clausura. Ojalá

   Enhorabuena a los organizadores, especialmente al GDR Alto Narcea Muniellos. excelente idea y organización. El marco de su desarrollo en el Palacio de Omaña, inigualable. Los ponentes excepcionales. El intercambio con Huesca, muy acertado.
 ¿Veremos un día nuestra Asturias Rural con su Patrimonio totalmente restaurado? ¿O seguiremos asistiendo impasibles a ese lento enmudecimiento?

   Sirvan estas jornadas al menos, para que el Alzehimer no se instale en nuestros pueblos.

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