Descarga de Cangas del Narcea-2011, desde Momián, en Somiedo.

El Cornón visto desde Momián.

   Nuestros brañeiros  la oían desde aquí  verano tras verano…Si se pudiera saltar: desde el Molinón al Cornón, y desde éste al Cabril, y luego al Acebo..., en un abrir y cerrar de ojos -27.900 metros, según google maps- podríamos descender a Cangas, entre el humo y el estruendo de los voladores, sin sufrir las infinitas caravanas que algunos padecieron éste año.

   Con sólo dos carreteras de acceso principal, y especialmente, la que llega de Oviedo, en la cual cuatro horas antes  ya se había formado el monumental atasco que obligó a muchos de los ¿70.000 asistentes? a dejar sus coches a seis kilómetros de distancia y continuar a pie. Lógicamente, no todos pudieron llegar para ver la descarga.

   Al coincidir en sábado, deberían haber previsto la afluencia masiva de personas que hubo, y, habilitar aparcamientos a las afueras del casco urbano, así como el traslado de la gente en autobuses. Al igual que se podría haber mejorado el servicio de taxis de madrugada y, que nadie perdiese el tiempo en una interminable espera en la parada,  recogiéndoles a las afueras  y evitando así la pérdida de tiempo para cruzar la villa saturada… Alguna, cansada de esperar, hizo esto último  y pudo coger el taxi a las afueras sin guardar cola.

Hay que aprender, avanzar y mejorar, constantemente.

   Noche de estruendos, caipiriñas y mucha, mucha sed…Una dulce voz decía que se bebería hasta las copas de los árboles…Otra hermosa voz aseguraba que siempre quería  beber con MODERACIÓN…l, o que pasa, es que nunca la encuentro…

   Regreso al principio. Desde Momián se escucha la descarga…, y si se viese la luz del resplandor la cual llegaría primero, lo haría  8,1 segundos antes que el sonido…luz, sonido, luz, sonido…, y después, el eco en Sierra Palombera.

   Las fotos son hechas desde Momián y con el Cornón al fondo: la primera y los terrenos que un día fueron viñedos, mirando al Sur, sobre Gúa.

   En el vídeo, grabado el día 21 en la descarga de las peñas juveniles, el futuro de la descarga está garantizado viendo ésto, aparece al comienzo el barrio del Cascarín, al cual llegaron en 1.855 Antonín de Miranda y Roso de Luna para ver al Padre Álvaro Flórez Queipo y Quirós de Miranda, preguntándole por el tesoro de los Lagos de Somiedo .

Una de mis tatarabuelas somedanas, llevaba el apellido Flórez, el cual sobrevive  aun en Somiedo. Su escudo, lo adornan tres flores de lis.

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